Alimentación Sana, Energética y Natural

Queremos crear una cultura dietética y alimentaria cuyo objetivo sea la salud y la energetización de la vitalidad humana para el desarrollo físico, emocional y mental.
El acto de comer no debe circunscribirse al mero apetito o al paladar, sino que debe crearse en torno a él toda una conciencia de la salud integral, entendiendo al ser humano como un conjunto armónico de cuerpo-mente-alma.

¿Cuanta azúcar estas bebiendo?

¿Sabías que tomar un refresco es equivalente a ingerir tres sobres de azúcar? ¿O que ingiriendo un único vaso de refresco de cola, por ejemplo, estás metiendo en el cuerpo alrededor de 25 gramos de azúcar y 110 kcal (vacías)? Lo mismo pasa con otros refrescos, ya sean de naranja (151 kcal), limón (92 kcal), gaseosa (92 kcal)… todos varían entre unos 20 y 30 gramos de azúcar.

Entonces, ¿dónde está el límite? Según las autoridades sanitarias, la recomendación diaria de azúcar que debería ingerir una persona adulta oscila entre los 50 y 60 gramos. O sea, que con tan solo dos vasos de estas refrescantes (aunque golosas) bebidas, ya se sobrepasa esa cantidad, ¿te imaginas tomarte 50 gramos de azúcar a “palo seco”? Un disparate, ¿verdad? Sin embargo, camuflado -como lo está- en el refresco es difícil darse cuenta de que lo es. Como para ponerse a hacer cuentas del resto de azúcar que ingerimos a lo largo de todo el día en el resto de alimentos.

Por ello, los refrescos son un enemigo de la dieta equilibrada y no digamos ya de la “operación bikini”. Si, además, se toma a diario, es uno de los alimentos que más te ayudará a coger peso. En definitiva, los refrescos, como todo, con moderación. No tienen por qué estar prohibidos, pero si moverlos a la “casilla” de alimento ocasional.

El cáncer y los lácteos

El cáncer y los lácteos
El doctor T. Colin Campbell sostiene de forma determinante que la caseína (el 90% del contenido de las proteínas de la leche vacuna) promueve las 3 etapas del cáncer: Su iniciación, su promoción y su progresión.

En sus estudios ha demostrado, que al cáncer se lo estimula nutricionalmente, de forma que las proteínas animales resultan un factor esencial para que el cáncer se desarrolle. El doctor Campbell ha encontrado en la caseína un aliado ideal para el desarrollo de todos los tipos de cáncer, desde el generado por consumir aflotoxinas, hasta el cáncer de mama o de hígado.

Usted puede encontrar sus premisas y sus desarrollos científicos en su obra: The China Study.
Luego de toda una vida de investigación científica, y de lucha contra el cáncer, Campbell promueve una dieta vegana como forma ideal de mantener una buena salud.
Campbell es un destacado científico de trayectoria internacional, que ha dedicado gran parte de su obra al estudio del cáncer. Unos de los grandes logros en su carrera fue la contribución para descubrir a la dioxina y a la aflotoxina.
Ha trabajado también en pos de la mejora de la nutrición a nivel mundial.

Enfermedades relacionadas con el consumo de lácteos
Son cada vez más las voces que alertan de la posible relación -más o menos directa- entre el consumo de los lácteos y las dolencias que se relacionan a continuación:

• ANEMIA FERROPÉNICA.
El doctor Frank Oski -director del Departamento de Pediatría de la Escuela de Medicina de la Universidad de Johns Hopkins (Estados Unidos)- asevera en su libro Don't Drink Your Milk! (¡No bebas tu leche!) que en su país entre el 15 y el 20% de los niños menores de 2 años sufren anemia por deficiencia de hierro y que la mitad del resto de las anemias que se producen en Estados Unidos están relacionadas con el consumo de leche y sus derivados por los pequeños sangrados gastrointestinales que la leche puede provocar.

• ARTRITIS REUMATOIDEA Y OSTEOARTRITIS.
Está constatado que los complejos antígeno-anticuerpo generados por la leche se depositan a veces en las articulaciones provocando su inflamación y entumecimiento. Estudios realizados en la Universidad de Florida (Estados Unidos) confirman que los síntomas se agravan en pacientes con Artritis Reumatoidea que consumen leche. Por otro lado, en un artículo publicado en la revista Scandinavian Journal of Rheumatology se afirmaba que en personas afectadas de esa patología que dejaron de ingerir lácteos y tomaron sólo agua, té verde, frutas y zumos vegetales entre 7 y 10 días la inflamación y el dolor disminuyeron significativamente. Agregando que cuando alguno volvía a una dieta lacto-ovo-vegetariana los síntomas reaparecían. Por su parte, un grupo de investigadores israelíes demostró en 1985 -por primera vez- que la leche puede inducir también la artritis reumatoidea juvenil. La asociación de la leche con la artritis reumatoidea del adulto ya se había establecido anteriormente pero no se había hallado ninguna asociación con la juvenil hasta el hallazgo de esos científicos.

• ASMA.
Se sabe que la leche puede estimular la producción excesiva de moco en las vías respiratorias y que la alergia a la leche es causa de asma. Además está completamente demostrado que los niños con exceso de moco y dificultades respiratorias a los que se les retira la leche de vaca mejoran de forma sorprendente.

• AUTISMO.
Investigadores italianos descubrieron que los síntomas neurológicos de los pacientes autistas empeoran cuando consumen leche y trigo. Se cree que los péptidos de la leche pudieran tener un efecto tóxico en el sistema nervioso central al interferir con los neurotransmisores. En sus investigaciones los doctores de la Universidad de Roma notaron una mejoría marcada en la conducta de esos enfermos tras dejar de ingerirla ocho semanas. En su sangre había altos niveles de anticuerpos contra la caseína, la lactoalbúmina y la betalactoglobulina.

Intolerancia a los lacteos

Muchas personas sufren de problemas digestivos como la intolerancia a la lactosa. Pero, ¿qué es exactamente a la lactosa? Es un azúcar que se encuentra en la leche y otros productos lácteos.

Cuando alguien es intolerante a la lactosa, es incapaz de digerirla adecuadamente porque hay una deficiencia de lactasa.

La lactasa es una enzima que metaboliza la lactosa en el sistema digestivo. La lactasa, básicamente, se une a las moléculas de lactosa de los alimentos y los convierte en glucosa y galactosa – azúcares simples que son absorbidos en el torrente sanguíneo.

Si existe una deficiencia de lactasa en el intestino delgado, los alimentos que contienen lactosa pasan a través del colon sin procesarse.

Esto a su vez también dará lugar a una deficiencia de las “bacterias buenas” que se necesita para un sistema digestivo saludable.

Corbalán defiende el uso "inteligente" de las grasas en la alimentación

SANTANDER, 20 Jul. (EUROPA PRESS)
El especialista en Medicina deportiva y exjugador de baloncesto, Juan Antonio Corbalán, ha mostrado este viernes su rechazo a las denominadas "dietas milagro", y ha defendido el uso "inteligente" de las grasas, especialmente las que aporta el aceite de oliva, para el desarrollo de una alimentación adecuada.

"No se pueden quitar las grasas, porque tienen una misión fundamental en nuestro organismo", insistió el deportista, quien señaló que los regímenes de adelgazamiento que no contienen las proporciones adecuadas de hidratos de carbono, grasas y proteínas "manipulan el metabolismo" y solo producen un "efecto espectacular" sobre el peso en pocos días, asociado también a una recuperación del mismo "haciendo dientes de sierra".

Así lo afirmó durante una rueda de prensa celebrada en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), con motivo de su participación en el seminario 'Aceite de oliva. Cultura del pasado, aromas del presente y bienestar del futuro', en la que también intervinieron el director de la Agencia para el Aceite de Oliva, Carlos Sánchez Laín, y el director gerente de la Fundación Patrimonio Cultural Olivarero, Álvaro González-Coloma.

El curso está patrocinado por la Fundación Patrimonio Comunal Olivarero, Consejo Oleícola Internacional (COI), Caja Rural de Jaén, Unicaja, GEA Westfalia Separator Ibérica, S.A.-Centro Desarrollo y Competencia Aceite de Oliva, y está organizado en colaboración con la Consejería de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Gobierno de Cantabria y la Agencia para el Aceite de Oliva del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Corbalán afirmó que los pilares para una sociedad "funcional y más sana" son una correcta alimentación y la práctica regular de ejercicio físico. "Cada vez vivimos más, pero lo que buscamos es mantener la calidad de vida que nos gustaría en los últimos años", apuntó el médico deportivo.

"De la misma manera que un deportista compite para ganar medallas, cada uno de nosotros a lo largo de nuestra vida entrenamos para vivir más y mejor", consideró Corbalán, quien lamentó la "paradoja" de que con el desarrollo tecnológico y la bonanza económica se esté evolucionando hacia una sociedad que "cada vez padece más enfermedades derivadas del sedentarismo y de los malos hábitos".

Por su parte, Sánchez Laín destacó el valor del aceite de oliva "no solo como alimento" sino también como parte de una cultura, a la cual "impregna en todos sus intangibles". Sobre sus propiedades, explicó que se trata de la "única grasa" que se extrae "directamente" de una fruta sin la intervención de procedimientos químicos, lo que le otorga unas propiedades "únicas".

En cuanto al futuro del sector, el director de la Agencia para el Aceite de Oliva apostó por la investigación para profundizar en las propiedades y valores del alimento, y su promoción en "nuevos mercados" en los que su consumo "todavía puede crecer".
En esta línea se pronunció también González Coloma, quien hizo hincapié en las propiedades "beneficiosas" del producto y citó diversos estudios que han probado en los últimos tiempos la eficacia del aceite en la prevención de las enfermedades cardiovasculares y el cáncer de mama, y recordó que contribuye a "solucionar todo tipo de enfermedades que surgen en la etapa final de la vida".

El director gerente de Patrimonio Comunal Olivarero aseguró que "afortunadamente" tanto la producción del aceite de oliva como su consumo se han incrementado en los últimos años a pesar de la crisis, aunque señaló que el precio que reciben los agricultores está "tocando su límite más bajo".

Las 'dieta milagro' sin control médico sólo sirven para vender libros

MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI) ha avisado de que realizar sin control médico las llamadas 'dietas milagro' --Atkins, Hollywood, Enteral Planas o Dukan-- puede ser perjudicial para la salud y ha asegurado que sólo lo sirven para vender libros u otros productos aparejados, dado que "en la mayoría de los casos" están hechas por personas ajenas a la nutrición.

Y es que, este tipo de dietas pueden ocasionar "numerosos trastornos alimentarios". Por ello, el presidente de FUCI, Gustavo Samayoa, ha insistido en que si una persona quiere perder peso debe acudir a un especialista y huir de estas dietas que son "nocivas" para el cuerpo y producen, en la mayoría de los casos, "pérdida energética y muscular en lugar de una pérdida de grasa".

Además, ha apostillado Samayoa, suelen producir un 'efecto yo-yó'. "Todas ellas tienen el denominador en común de prometer una pérdida de peso importante de manera rápida, explican que el seguimiento de la misma es sencillo, aseguran que no son peligrosas sino saludables, se sirven de imagen de famosos para promocionarse, se basan en estudios no comprobados o inexistentes y son poco precisas y contrarias a los consejos generales de los nutricionistas", ha recalcado.

Por todo ello, la FUCI ha recomendado a los consumidores acudir a un médico nutricionista si se quiere hacer una dieta, realizar ejercicio al menos tres veces por semana, hacer cinco comidas diarias con una alimentación sana y equilibrada, anteponer la salud al físico y rechazar los productos milagrosos o medicamentos sin el control de tu médico.

La comida light, ¿adelgaza?

En nuestra sociedad hay muchas creencias erróneas acerca de la comida, de lo que es sano o lo que no se debe comer. En ocasiones, estos mitos están muy extendidos y son comúnmente aceptados porque parte de evidencias del pasado que la ciencia ha refutado pero que se mantienen en el imaginario común. Como que los alimentos light adelgazan cosa que no es cierta, simplemente tienen menos calorías.

Las vitaminas engordan
Cada vez es más frecuente la ingesta de un suplemento vitamínico, sobre todo en determinadas épocas, para "ayudar al cuerpo". Conviene recordar que estos no siempre son necesarios y que un exceso de algunas vitaminas podría ser también perjudicial.

Las vitaminas son esenciales para nuestro organismo y, aunque las denominadas liposolubles pueden provocar problemas si se toman en grandes cantidades, en ningún caso engordan puesto que no suponen aporte calórico alguno.

Las grasas no son sanas
"La virtud es un término medio entre dos vicios", ya lo dijo Aristóteles. Las grasas son una fuente esencial de energía e insustituible en algunos casos. El colesterol, sin ir más lejos, es clave en la síntesis de muchas hormonas y en la formación de las membranas celulares. Ahora bien, un consumo inadecuado de grasas, en especial de las saturadas, está asociado con varias enfermedades como diabetes o hipertensión.

Comer huevos ¿es malo?
Su alto contenido en colesterol ha hecho de los huevos un alimento poco popular. Sin embargo, consumimos alrededor de 260 huevos por persona al año porque forman parte de una gran variedad de productos. Además, tienen nutrientes fundamentales.

A pesar de que sólo aportan unas 90 calorías, su yema lleva unos 225 mg de colesterol, a sólo 75 mg de la cantidad diaria recomendada en una dieta sana. Pero no se absorbe completamente así que sólo las personas con problemas de colesterol deben tener cuidado con ellos. Cuatro o cinco a la semana es una cantidad normal para personas sanas.

Los aceites vegetales son saludables
Las grasas no son sanas.- "La virtud es un término medio entre dos vicios", ya lo dijo Aristóteles. Las grasas son una fuente esencial de energía e insustituible en algunos casos. El colesterol, sin ir más lejos, es clave en la síntesis de muchas hormonas y en la formación de las membranas celulares. Ahora bien, un consumo inadecuado de grasas, en especial de las saturadas, está asociado con varias enfermedades como diabetes o hipertensión.

La leche, ¿beneficiosa o perjudicial para la salud?

MÉDICOS DE EEUU PIDEN RETIRAR LA LECHE DE LOS MENÚS ESCOLARES
Los beneficios de la leche siempre han sido exaltados por los profesionales médicos y nutricionistas. De ella se ha dicho que es uno de los alimentos más nutritivos y completos, entre cuyas propiedades se encuentran proteínas, carbohidratos, fosforo, potasio, calcio o vitaminas A, C y B12. Sin embargo, en los últimos tiempos se ha roto este consenso y cada vez son más las voces críticas que alertan sobre los supuestos perjuicios de consumir leche. Aunque los argumentos en contra son diversos y diferentes, todos parten de la misma premisa: la leche es para los lactantes y no para los adultos.

En Estados Unidos estas controversias se iniciaron en la década de los 60 y a día de hoy incluso existe un potente lobby, el Physicians Committee for Responsible Medicine (PCRM), que tiene como principal objetivo concienciar a las administraciones y la población en general de que la leche es nociva para la salud.
Su última iniciativa para desmontar lo que consideran un mito construido sin fundamento ha sido una petición al Gobierno norteamericano para que retire la leche de los comedores escolares.

Para este grupo de médicos la creencia de que la leche fortalezca los huesos de los niños en edad de crecimiento es falsa y hasta la definen como un placebo ineficaz: “Tomar tres vasos de leche al día no aporta la cantidad mínima recomendada de calcio, un objetivo que sí se alcanza con otros alimentos más nutritivos”.
En la documentación remitida a los responsables del National School Luch Program argumentan que las proteínas y el calcio de la leche de origen animal son difícilmente asimilables por los seres humanos, ya que estaría biológicamente concebida para amamantar a los animales de la misma especie. A continuación relatamos otros de los argumentos por los que se cree que la leche es nociva.

Alto contenido en calorías y grasas saturadas.
El presidente del Physicians Committee for Responsible Medicine, Neal Barnard, explicaba en una entrevista a The New York Times que la leche y sus derivados lácteos contienen un alto contenido en grasas saturadas, cuyo consumo excesivo podría provocar diabetes de tipo 1. Según Barnard, este alimento contiene la misma cantidad de calorías que las bebidas isotónicas.

Grandes porcentajes de intolerancia a la lactosa.
La lactosa es un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y sus derivados. Para digerirla adecuadamente se necesita tener en el intestino la suficiente cantidad de una enzima llamada lactasa. Su deficiencia es algo habitual en muchas poblaciones del mundo, especialmente entre los asiáticos. En España se estima que la intolerancia a la lactosa afecta a una de cada tres personas, con mayor o menor grado de rechazo.
Como sustituto se consume, además de quesos y yogures, la leche de soja. Sin embargo, ésta también tiene sus consecuencias negativas al producir una acidez entre cinco y seis veces mayor de lo habitual, lo que puede provocar placas bucales y caries, según se recoge en un estudio publicado en el Journal of Dentistry.

Aditivos químicos.
Las explotaciones intensivas usan habitualmente piensos para alimentar a las vacas que contienen hormonas de crecimiento y antibióticos. Otros de los aditivos, que le dan un aspecto más blanquecino y cremoso, están relacionados con los problemas de acné, alergias o inflamaciones, según el PCRM.

Alergias.
Sólo en Estados Unidos hay unos tres millones de niños alérgicos a la proteína de la leche de vaca (APLV). Las reacciones pueden ir desde leves vómitos hasta consecuencias mucho más graves para salud, como arritmias y colapso vascular.

No contribuye al fortalecimiento de los huesos.
El nutricionista y columnista del Times Mark Bittman, apuntaba en uno de sus artículos de opinión que la leche no evita la falta de calcio en los huesos y antepone otros remedios para sortear la osteoporosis como el ejercicio físico y la obtención de vitamina D mediante la exposición a los rayos solares. Además, concluye que hay que cambiar la mentalidad porque si se consume leche no debe ser por sus beneficios para la salud, sino por el placer gustativo.

El estudio Vitamin D, Calcium, and Dairy Intakes and Stress Fractures Among Female Adolescents, publicado el pasado mes de marzo en la revista científica Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine, concluye que ni el calcio ni el consumo de lácteos está asociado a un descenso del riesgo de producirse fracturas de hueso. Estos mismos resultados se obtuvieron en la investigación Calcium, vitamin D, milk consumption, and hip fractures: a prospective study among postmenopausal women de la American Society for Clinical Nutrition que, tras analizar a más 72.000 mujeres, descubrió que las consumidoras de leche no eran menos propensas a sufrir fracturas de caderas que el resto.

Desde el PCRM argumentan que la cantidad de calcio absorbida por el cuerpo no solo depende de los alimentos, sino de una variedad de factores, como los genes, la cantidad de vitamina D recibida, el sedentarismo, y otras influencias dietéticas ya que las proteínas de origen animal, el sodio y la cafeína evitan la absorción de calcio.
En caso de que sea indispensable un complemento de calcio, recomiendan otros alimentos “más saludables”, como los frijoles, el tofu, el brócoli, la col rizada, los cereales o el zumo de naranja.

Taller en Cartagena

Taller de Alimentación Energética y Natural en Cartagena
Día: Sábado 21 de julio de 2012 a las 19 horas

Taller sobre la alimentación Ácida y Alcalina











Nutrición Inteligente

Solo el 43% de los españoles consumen a diario la suficiente cantidad de frutas y verduras.

■Una alimentación bien compensada tiene grandes efectos beneficiosos para la salud.

■Desde prevenir el envejecimiento hasta mejorar la piel pasando por fortalecer la memoria y nutrir la mente.

Esta no es una página sobre cómo perder peso a toda velocidad y con una restricción brutal de alimentos que, por otra parte, son en general necesarios para nuestro cuerpo y también para nuestra mente. Aquí vamos a hablar de alimentación sana e inteligente, sin olvidar nuestra mente, porque ella también requiere ciertos nutrientes. Un abecedario de alimentos que no deberían faltarnos en la mesa.

Avena. "Es casi el alimento óptimo para la salud", señala el doctor Pros (autor de Cómo cura la avena). Y es que este cereal tiene una completa combinación de proteínas, grasas, hidratos de carbono, minerales y vitaminas B y E. Destaca este especialista el sílice: "Porque nutre el tejido conectivo humano, beneficia las articulaciones, el sistema nervioso y la electrobioquímica del organismo, además de mejorar las facultades memorísticas".

Brócoli. Es uno de los llamados superfoods por sus propiedades nutritivas y antioxidantes. De él se dice que ayuda a bloquear el empuje de los agentes cancerígenos.

Cebolla. Es, al igual que el ajo, un excelente antibiótico natural. Eso sí, hay que consumirla cruda, porque la cocción destruye sus nutrientes. Su aporte de fibra y su contenido mineral y vitamínico hacen de ella una magnífica reguladora del organismo.

Dátil. El biólogo Santiago Orts deja claras sus bondades: "Es muy rico en hidratos de carbono, proteínas y minerales: hierro, potasio, calcio, sodio, magnesio, cinc, manganeso... además aporta gran cantidad de vitaminas A, C y muchas del grupo B. No tiene colesterol ni ningún tipo de grasas de origen vegetal, por eso es un alimento muy consumido por los deportistas".

Espinacas. Más que por el famoso hierro que tan fuerte hacía a Popeye, lo que las espinacas nos dan son antioxidantes, que es la mejor ayuda para prevenir el envejecimiento. Además, posee fibra, vitaminas, minerales y pequeñas cantidades de hierro y calcio.

El cerebro precisa de grandes cantidades de ácidos grasos esenciales Frutos rojos. Contienen un bajo aporte calórico, son antioxidantes, tienen fibra y propiedades diuréticas y laxantes. Y por si todo esto fuera poco, son una gran aliado para fortalecer las defensas.

Germen de trigo. Destaca su notable aporte de vitamina E, gran antioxidante. Poderoso contra el cansancio intelectual, previene la acumulación de colesterol en las arterias. Como también tiene cinc y vitaminas del grupo B, es bueno para el cabello, las uñas y la piel.

Huevo. Hasta un día mundial tiene el huevo: el 14 de octubre (y un instituto propio). El fuerte de este popular alimento está en las proteínas de alto valor biológico que contiene. Solo hay un problema: para quedar a salvo de sus posibles bacterias, lo mejor es consumirlo siempre muy bien cocinado.

Jengibre. Pone en movimiento todo el organismo (sobre todo la sangre y la circulación linfática) y resulta muy recomendable, según asegura la doctora Gillian McKeith en El gran libro de la alimentación, para el metabolismo en general. McKeith recomienda su uso también en caso de padecer anemia.

Kiwi. Este colocón de antioxidantes y vitamina C nos protege de catarros y gripes. Además, contiene fibra y ácido fólico (muy importante para las embarazadas, los niños y los mayores).

Legumbres. Recomendadas por algunos especialistas para ayudar a equilibrar los niveles hormonales. Esto se debe a sus efectos fitoestrogénicos, su contenido en fibra y sus nutrientes.

Mango. Rico en magnesio y en vitaminas A y C (200 gramos de pulpa cubren las necesidades de una persona de dichas vitaminas). Es bueno para la vista, los huesos y el sistema inmunológico.

Nuez. Con dos nueces al día vamos a darle al organismo una destacable ayudita. Este fruto seco cuida el corazón, equilibra el colesterol y la presión arterial, además de los niveles de glucosa.

Ortiga. Es antihemorrágica, tónica, antialérgica y antihistamínica, diurética, analgésica y antiinflamatoria. ¿Hay alguien que necesite oír algo más para decidirse a prepararse una infusión de ortiga?

Para la mente es recomendable comer ginkgo biloba, algas, colina y lecitinaQuinoa. "Un alimento realmente maravilloso", señalan expertos de la Universidad Brigham Young (EE UU). "Contiene el doble de proteínas que los cereales habituales, vitaminas del grupo B, muchos minerales e incluso una dosis notable de grasas saludables".

Rábano. Pocas calorías y buena fuente de hidratos de carbono y de fibra. De su contenido en vitaminas destaca la C; y de los minerales, el potasio y el yodo (en cantidad superior a la mayoría de hortalizas).

Soja. Su proteína no aporta los valores negativos de las proteínas animales (colesterol, hormonas, colorantes, conservantes) y sus aminoácidos esenciales aminoran las descompensaciones hormonales.

Tomate. Excelente fuente de fibra, minerales (potasio y fósforo) y vitaminas, además de ser un destacado antioxidante. Favorece la absorción del hierro de los alimentos, ayuda a prevenir infecciones y es bueno para casi todo: vista, piel, cabello, huesos y sistema inmunológico.

Uva. La cantidad de vitamina 6 (una potente ayuda para mantener el buen funcionamiento del cerebro) que contiene solo es superada por las frutas desecadas y las tropicales.

Zanahoria. El betacaroteno es lo que la convierte en una auténtica reina para la piel y para la vista. También contiene hidratos de carbono y fibra.

Fuente: 20 minutos

Lácteos y cancer de mama

La profesora Jane Plant CBE, es uno de los científicos más distinguidos de Gran Bretaña. Jefe Científico de la British Geological Survey y miembro de numerosos comités influyentes del gobierno, su CBE fue para los servicios a la ciencia.

Jane escribió 'Tu vida en tus manos', como resultado de muchos cientos de conversaciones que ha tenido con las mujeres que querían respuestas. Como dice Jane, "el cáncer de mama es un tema desconcertante y aterrador".

Ella sabe más que nadie, después de haber sufrido cinco veces por cáncer de mama cada vez más avanzada, que se extendió a su sistema linfático antes de que fuera finalmente derrotado.
Está escrito desde el corazón. En él se explica cómo nunca se dio por vencida y cómo vencer al cáncer. Ella comparte todo lo que ella descubrió que otros puedan beneficiarse. Y, para cualquier persona que no sufre de cáncer de mama, ella le dice a la cantidad de pasos positivos se pueden tomar para cambiar la dieta y estilo de vida para tratar de superar los obstáculos y no se convierta en uno de los cada vez mayores de información estadística.

La historia de la profesora Jane Plant, geoquímica y jefa científica del British Geological Survey -una prestigiosa institución pública británica que se dedica a la investigación en materia de Geología-, puede constituir un significativo ejemplo para muchas mujeres ya que ha sobrevivido a 5 tumores mamarios y a las prácticas médicas convencionales para tratar su cáncer. Y lo ha hecho, según afirma ella misma, de una forma muy sencilla: eliminando todos los lácteos de su dieta.

Su historia es parecida a la de otras muchas mujeres. Sintió el mismo pánico cuando le diagnosticaron cáncer de mama y confiada en el buen saber y hacer de los oncólogos se sometió a una mastectomía y a la irradiación de sus ovarios porque le dijeron que así se provocaba la menopausia, se suprimía la producción de estrógenos y se podría curar el cáncer. Pero todo resultó falso. De hecho el cáncer se le reprodujo hasta 4 veces.

“Sufrí la amputación de una mama, me sometieron a radioterapia y a una quimioterapia muy dolorosa. Me vieron los especialistas más eminentes de mi país pero en mi fuero interno estaba segura de que me estaba enfrentando a la muerte. Y estuve a punto de tirar la toalla”, cuenta la profesora Plant en su libro Your life in your hands (Tu vida en tus manos) en el que relata su propia experiencia y explica cómo llegó a la idea que ha salvado su vida.

“A raíz de un viaje de mi marido a China -cuenta en su obra- empecé a pensar en que mi enfermedad era virtualmente inexistente en dicho país. De hecho sólo una de cada 10,000 mujeres muere de cáncer de mama en China, mientras que sólo en el Reino Unido las cifras oficiales hablan de una de cada doce.

Entonces mi marido -quien también es científico- y yo misma, empezamos a investigar sobre la forma de vida y alimentación de los orientales hasta que llegamos a la idea que me salvó la vida: las mujeres chinas no enfermaban de cáncer de mama ni los hombres desarrollaban tumores prostáticos porque son incapaces de tolerar la leche y, por tanto, no la toman. Es más, supimos que los chinos son incapaces de comprender la preocupación occidental por tomar leche de vaca. Ellos nunca la utilizan ¡y menos para amamantar a sus bebés!

Y si te paras a pensarlo no puede ser una simple casualidad que más del 70% de la población mundial haya sido incapaz de digerir la lactosa. Hoy lo que creo es que la naturaleza intenta avisamos a tiempo de que estamos comiendo un alimento equivocado”.

Cuando Jane Plant se planteó todo esto se estaba tratando con quimioterapia su quinto tumor mamario. Y fue entonces cuando decidió suprimir por completo la ingesta de lácteos, incluidos todos los alimentos que contienen algo de leche: sopas, galletas, pasteles, margarinas, etc. ¿Y qué sucedió? “En sólo unos días el tumor empezó a encogerse. Dos semanas después de mi segunda sesión de quimioterapia y una semana después de haber suprimido la leche y sus derivados, el tumor empezó a picarme. Luego se ablandó y comenzó a menguar. Unas seis emanas después había desaparecido.

De hecho mi oncólogo del Charing Cross Hospital de Londres no pudo reprimir exclamar un maravillado “¡No lo encuentro!” cuando examinó la zona donde había estado el bulto. Por lo visto no esperaba que alguien con un cáncer tan avanzado -ya había invadido mi sistema linfático- pudiera sobrevivir. Afortunadamente aquel oncólogo logró superar su escepticismo inicial y en la actualidad recomienda una dieta sin lácteos a sus pacientes. Convencida de que dejar de tomar lácteos era lo que le había salvado la vida, Jane Plant decidió plasmar sus conocimientos y su experiencia en el libro antes mencionado. Y de inmediato más de 60 mujeres aquejadas de cáncer de mama se pusieron en contacto con ella para pedirle consejo. Sus tumores también desaparecieron.

“Aunque no fue fácil aceptar que una sustancia tan ‘natural’ como la leche pudiera tener tales repercusiones para la salud -explica Plant- ahora no me cabe duda de que la relación entre los productos lácteos y el cáncer de mama es similar a la que existe entre el tabaco y el cáncer de pulmón.

Pero no sólo eso porque, por ejemplo, ya en 1989 el doctor Daniel Cramer -de la Universidad de Harvard- determinó que estos productos están implicados en la aparición del cáncer de ovarios.
Y los datos sobre el cáncer de próstata conducen a conclusiones similares. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que el número de hombres que padecen este cáncer en China es de 0,5 por cada 10,000 mientras que en el Reino Unido la cifra es 70 veces mayor. La clave está pues, sin duda, en el consumo de lácteos“.

Para la profesora Plant la leche de vaca es un gran alimento… ¡pero sólo para los terneros! Y afirma convencida que la naturaleza no la ha destinado a ser consumida por ninguna otra especie. “De hecho estoy convencida -concluye- de que salvé mi vida por dejar de consumir leche de vaca. Sólo deseo que mi experiencia puede servir a más mujeres y hombres que, sin saberlo, pueden estar enfermos a causa de los lácteos que consumen”.

En su libro, además de detalles de su propia experiencia e interesantes datos sobre sus investigaciones acerca de los efectos de la leche de vaca sobre nuestra salud, se recogen una serie de recomendaciones nutricionales que se resumen en alimentarse básicamente de leche de soja, té de hierbas, semillas de sésamo, tofú, nueces, mucha fruta y verduras frescas.